Me asomo a la baranda y siento el vértigo de la brisa, el sonido del agua mucho más abajo. El viento me mueve el cabello y se roba una lágrima. A mis espaldas los coches son como disparos a matar, unos tras otros, sin parar.
En mi mano, ya marchito y seco, un pétalo de rosa. Extiendo el brazo, como mendigándole al cielo un milagro y lo dejo caer. Pero en lugar de sumirse a su destino, se rebela y flota, hamacándose en el aire. Lo veo alejarse, viajar sobre el río, cada vez más distante.
Pienso en la ausencia, en ese abrazo que ya no tendré, en la voz que no oiré y busco ya sin suerte ese pétalo, observando el horizonte pero ya sin ver. Se ha ido, se ha ido otra vez.
La Gardenia.
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Nunca había tenido en mis manos una flor de Gardenia, ni imagine que esa
simple flor me llevaría por caminos filosóficos en los que nunca había
tr...
Hace 15 horas.
18 comentarios:
Una vez me dijeron que, mas allá del motivo por el cual "no tendremos ese abrazo otra vez", hay que valorar profundamente los momentos que fueron vividos a pleno y atesorarlos entre nuestros mejores recuerdos para siempre.
Hermoso su relato.
Me hizo agarrar frío el airecito en el balcòn .
:)
Beso!
PRI!! :D
hay premio?
Me gustó el suspiro en el poema, el viento que toca y conmueve con sólo tocar el pétalo, es un gusto leerte Neto, besos
El pétalo de una rosa es el mejor símbolo de lo efímera y suave y única y hermosa que puede ser la vida a veces...
:/
Abrazo grande
SIL
Doña Ro, somos recolectores de recuerdos por naturaleza, claro que si. Vamos a hablar con la gerencia de blogger a ver si hay premios para dar. Siempre ha sido este un blog mezquino, lo veo difícil jaja. Gracias! Saludos!
Doña Mixha, tiene un aire volátil este texto, breve pero triste, quizá un momento de inspiración de la misma forma y que por ende, también ya partió. Gracias! Saludos!
Doña Sil, si, es un excelente resumen, una gran analogía. Por un tiempo, hasta nos deja su aroma. Y después, bueno, ya sabemos. Pero todo se supera, hasta aquello que se aleja. Gracias! Saludos!
Siempre habrá sufrimiento, pérdidas y abrazos que no volverán. Y siempre estarán esos coches para recordarnos que aún así la Tierra sigue girando.
pensé que terminaba de otra manera, me sorprendió.
Muy poético todo.
Saludos Neto
Yo también siento la brisa y el vértigo asomada en la baranda...
Me gustó la comparación de los coches con disparos a matar, además hace pensar, realmente son como disparos que van a dar, a matar... y matan!
Y el pétalo que se resiste por unos instantes a caer, que retoma el vuelo por libre y deja volar nuestra imaginación, el recuerdo de lo que fue o puedo haber sido y ya... nunca podrá ser!
Poético a más no poder, pero triste, también a más no poder!
Bello y triste!
El destino.
Un abrazo!
;)
Neto,todos tenemos,en nuestras vidas,recuerdos que afloran de repente...nos topamos con algo a lo que antes no le habíamos prestado atención , como un pétalo...y de repente ese insignificante, "pétalo" se transforma en un cúmulo de vivencias del pasado... Cariños.Martha
Doña Sonix, póngale la firma que así será. Si, por suerte estarán, para saber donde apoyamos los pies. Muchas gracias! Saludos!
Don Iván, ya lo veías cayendo de cabeza ja! Un abrazo Iván, genial las dos pelis que pusiste en el blog. Un abrazo!
Doña Edurne, muchas gracias. Lo peótico me remite a la tristeza, por más que no debiera ser así, pero quizá porque tanto una cosa como la otra tienen su belleza propia, es que las relaciono. Saludos!
Estimada Martha, si, es así. A veces obran mágicamente, y otras, como un puñal. Pero más vale encontrar esos "algo", que vivir en la oscuridad. Gracias! Saludos!
Muy bello Neto, a pesar de la nostalgia que contiene. Hay abrazos que despues del dolor, regresan, es una ilusión, pero es algo.
Un beso.
mariarosa
netito:
el texto que escribiste me trajo un lindo recuerdo,yo tendria unos 4 o 5 años y una vez que fui a visitar a mi abuela, que vivia en un septimo piso en rosario, intente armar con papel un avioncito, pero me salio algo parecido a un trompo, o un como invertido. lo asombroso fue que al tirarlo comenzo a girar y se elevo, y se fue volando para el rio. despues quisimos hacer otros, pero no funcionaron.
me gustó.
un abrazo
Doña Mariarosa, el pasado es en si una ilusión y a veces es bueno perderse en ella. Muchas gracias. Saludos!
Don Panchuss, que bueno que el texto abra esa puerta en tus recuerdos. Lindo sería un cuento tuyo sobre eso, vos en el futuro, viendo regresar por la ventana el avioncito de papel. Gracias! Un abrazo!
Las flores marchitas siempre me han hecho sentir de la manera más triste jamás pensada.
Muuuá
Doña Miss Migas, es que las flores marchitas encierran el paso del tiempo, lo que ya no volverá a ser. Muchas gracias. Saludos!
Muy emotivo relato, se siente uno mecido por la brisa subido sobre el pétalo cayendo dulce, mientras el corazón se contrae de melancolía. Eres sorprendente Neto, y sin embargo los coches disparan y matan...ja! se ve que la naturaleza de la calaverita se escapa por las rendijas del texto. Bien!
Besos!
¡Noo! Es devastador y contundente. Una maravillosa mezcla grosera de la avenida infestada de coches, con un corazón roto entre brisas y pétalos. Saludos.
Doña Tinta, el equilibro entre lo tierno y lo criminal jajaja. Muchas gracias! Saludos!
Doña Yun, bienvenida al blog! Un contrapunto devastador jaja gracias! Saludos!
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