Cuando camino por calle Libertad me persigue una sombra gris. Me he dado cuenta tras haber repetido la caminata dos veces por día durante una semana. Y en diferentes horarios.
La sombra comienza a seguirme ni bien cruzo la esquina de Libertad con Independencia. Se queda a unos dos metros, deslizándose entre baldosas flojas y árboles a medio podar. Intenté (en vano) sorprenderla, pero siempre fue inútil ¡La sombra intuye mi movimiento!
Opté por lo más racional y dejé de caminar por calle Libertad. No vaya ser que un día me alcance y me revele la verdad de su existencia.
Hace 2 días.
9 comentarios:
Bastante mal se debe haber portado en la clase de informática con Silvina usted. Ya me dijo que le iba a hacer esa jodita para vengarse: "apenas ese Parrilla pise mi vereda, le mando una sombra que lo siga...". Ella no quería entrar a su salón unos meses; ud. no pisará esa esquina en su vida.
Ah, me encantó ese relato. Pocos como usted redondean los relatos breves paa que digan todo lo que tienen que decir dejando el margen exacto para la imaginación (y el espanto).
Por las dudas, esta misma tarde le llevo a Silvina alguna de las tantas cosas que tengo para devolverle y de paso, con la suficiente envidia, juno a ver si no tiene una sombrita para mí...
bueno hombre, usted tranquilo siga por Independencia, que al fin de cuenta parte de la libertad se encuentra en la independencia y viceversa , no?
ahora si el problema es que la sombra esa viene a colación de alguna travesura de la suyas, agarrate catalina que no te salva nadie, jejeje!
(usted don oso sin que neto nos oiga luego me cuenta que anda haciendo el purrete en las clases de informática ok?)
Ja, pobre Silvina, si en los pocos meses que estuvo en ese cuarto año se debe haber vuelto loca! De castigo entonces nos pusieron a un tal "Oso" Marinozzi en quinto año, jejeje. Vaya casualidad en la que cae el relato! En el próximo doy su dirección profe!
(Diego, en la clase de informática molestaba con el fin que me dejaran jugar un rato en la pc que tenía el truco!)
Cierto, en ese sublime mundo de pc inservibles de antes de su compra, el truco era un lujo. En realidad no recuerdo si ud. llegó a conocer en la escuela el furor del Stunt. Ah, ese sí que era un simulador. Los alumnos simulaban que les gustaba para no dar clase. El profe simulaba que no los veía jugar así le dejaban dar clase. Y Silvina simulaba ser muy modosita mientras pergeñaba sombras para los más chuscos.
No, el Stunt no lo conocí en la escuela, un amigo quería que me gustara de prepo, pero me opuse. Nada era comparable con el PC Fútbol!
Me acuerdo en quinto cuando instalábamos el Corel 5, como tres horas esperando para que terminara la instalación y el gringo Bellesi puso cancelar! Ja, la calentura del proooofe!
una maza el Stunt!! Mi titulo en esa escuela mediocre es "Bachiller en Stunt"...tambien recuerdo el Stricker, te acordas de ese! Los campeonatos que nos haciamos mientras el profe de informatica intentaba enseñar a hacer circulitos en el Corel...
No se que tiene que ver con el relato pero me vino a la mente eso (y eso es mucho...que me venga algo a la mente)
Justamente, que le venga algo a tu mente es un "espanto". :)
Uhhhh esto me sonó re 'casa tomada'de cortazar buenisimo y cortito. SAludos carolaina.
Después dicen que los profes no aprenden nada de los pibes de hoy día. Aprendí a hacer pistas de Stunt y a hacr trampa para que no te multen el tiempo. Aprendí a que existe lo imposible. Aprendí con quienes vale la pena tener paciencia y con quienes perderla perderla.
Ah, ¡y que de vez en cuando cae una idea en ciertas mentes!
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